Siete Mitos de Moda y Estilo en Colombia

Siempre insisto en poner especial esmero en lo que vestimos de acuerdo a la ocasión, pero si bien  procuramos causar una buena impresión, es complejo lograr la aprobación de todos, – especialmente si la apreciación de quien juzga es limitada. En Colombia por ejemplo a pesar del auge que vive la moda en algunas esferas familiarizadas con el tema, la realidad muestra un panorama distinto en el individuo promedio, que ya sea por arraigos, resabios inculcados, o por su entorno se niega a aceptar  lo que le es totalmente ajeno. Siempre escucharemos voces de reproche ante lo que se debe llevar y lo que es un desacierto, que irónicamente vendrán del criterio menos idóneo – y no estoy hablando de juicios expertos….

A muchos les ha pasado al vestir de negro total, escuchar un “Viuda alegre”. Si estamos en la costa y llevamos mangas largas, somos cachacos,  junto con las infaltables “Te falta el caballo” o “vas a cruzar charco” si llevamos  botas….. expresiones que de forma instantánea delatan poco roce y cultura. Decir que educaremos a la gente a asimilar la variedad es un buen comienzo pero toma tiempo, entre tanto  para quienes son abiertos pero alguna vez han batallado con la duda frente al closet, vale señalar algunos mitos de moda y estilo que  siguen limitando el vestir en Colombia.

1. DE NEGRO TOTAL EN CLIMA CÁLIDO : El negro es el color de la elegancia, sin que esto signifique que solo deba ser llevado en situaciones que ameriten elegancia; si bien en verano o primavera se festejan otros colores y estampados, el negro es de siempre.  Quienes están al tanto de la moda, saben que muchos diseñadores han propuesto el “verano oscuro” como alusión al negro para esta temporada,  que en este caso asimilaremos al clima cálido de la costa. Entonces por qué  la extrañeza  al ver a alguien a plena luz del día y en clima cálido vestido de negro? – la respuesta es una, eso solo pasa aquí – te llaman el zorro si eres hombre y piensan que vas de velorio si eres mujer,  a la larga murmullos de provincia fuera de lugar.  La teoría del color sostiene que el negro genera calor, pero un diseño sin mangas en material ligero resulta llevadero.

2. CHAQUETAS SOLO PARA CLIMA FRÍO: Muchos creen que la elegancia de antaño en nuestro país, es pura fabula de la abuela, relatos que dibujan una época de oro poco asimilable con el desaliño de hoy. Por ello a muchos les parece descabellada la idea de que en la Costa alguna vez el buen vestir incluía una buena chaqueta de lino. Si,  -hace calor,  pero no es total excusa para siempre llevar el uniforme costeño – top, short y sandalias. Si puedes soportar una larga melena, tambien puedes soportar una chaqueta, no será de cuero claro está, pero siempre que la ocasión lo amerite podemos llevar una de textura ligera – por ello existen las llamadas chaquetas de primavera y de verano.

Fuente aquí

3. BOTAS EN VERANO – Puede que las botas sean consideradas “un básico” durante el otoño e invierno, pero tal razón no las excluye del guardarropa en primavera y verano. Un par de botines al tobillo con un vestido de verano es una dupla de mucha tendencia. Sin el ánimo de implantar  visiones foráneas a nuestra realidad, si vale la pena saber como va la movida global en este aspecto: en Coachela por ejemplo- un festival de música que cada vez cobra mas interés como escena de moda, son constantes las apariciones de it girls y otras fashionistas con interesantes atuendos en los que destacan botines a plena luz del día y bajo el sol.

Diane Kruger, Kate Bosworth y Jessica Alba en looks veraniegos que incluyen botas y botines via FabSugar.com

4. El Sombrero es para excéntricos – Llevar esta pieza aún resulta una extrañeza para muchos, tildando a quien lo lleve de excéntrico y de más, cuando en realidad, mas que un accesorio de estilo, es un elemento de protección que no es exclusivo de la playa y piscina. En ciudades como Bogotá por ejemplo, en donde aunque no parezca, la exposición al sol es mayor, el uso del sombrero sería totalmente oportuno; por su parte en la costa su uso no debería representar mayor espectáculo, especialmente si se trata de proteger el rostro de la incandescente luz solar – pero seguimos guardándolo para el viaje por evitar escuchar a lo lejos “Te falta el caballo”

5. LOS COLORES DEBEN COMBINAR: Aún somos tímidos con el uso del color y seguimos confiando en las combinaciones seguras aunque sean aburridas. Obviamente cada quien tiene preferencia por un color u otro, por convicción o porque le favorece, mientras que otros  pagan su audacia con los usuales murmullos al llevar mezclas de color osadas. No hay que ser un ilustrado o persona de vanguardia para saber que los colores opuestos según teoría del color, revelan maravillosas combinaciones, aunque a algunos les duela la vista. Así que si te gustan los colores no te cohíbas por el que dirán, consulta el circulo cromático aquí.

6. SANDALIAS Y FALDAS CORTAS EN LA CAPITAL Bogotá ostenta un nivel de moda a la altura de cualquier capital del mundo; sin embargo, en la capital también puede respirarse una rigidez arraigada por parte de quienes  limitan el código de vestuario a pantalones, abrigo y bufanda; aunque en la capital las temperaturas pueden llegar a ser muy bajas y en las noches es común el uso de un abrigo, durante el día las circunstancias pueden variar; una falda bien llevada es perfectamente admisible y no debería ser motivo para que te llamen “calentana” (que aunque se refiere personas de clima cálido que arriban a la capital, tambien es usado por algunos para referirse con una connotación despectiva hacia mujeres de otras regiones que no asimilan el código de la capital). Volviendo al grano, puedes llevar una falda a la rodilla con tacones siempre y cuando abrigue un poco la parte superior, o una minifalda, con un saco largo o chaqueta acorde con la temperatura, la clave es no ir muy reveladora, para que no te llamen calentana y no pases frío si baja la temperatura.

7. SEXY ES SINONIMO DE BELLEZA: Este es un extra para complementar el punto anterior y evitar el “calentana” en el caso de ciudades frías. Ok, – al grano: Para muchas colombianas “Sexy” es sinónimo de belleza, pero resulta que su connotación equivale ingenuamente o apropósito a verse un tanto vulgar,  con lo que casi siempre resumen el atractivo o virtud, con como se ven en jeans, ropa muy justa y reveladora, cuando en realidad una mujer sexy, lo es incluso vestida de monja. Siempre que la figura lo permita, un mini vestido, un escote o minifalda son bienvenidos, pero muchas rayan en la misma estampa sin reparo de detalle; si vas a mostrar que sea con clase. Ser interesante es otra forma de ser sexy, que muchas deberían poner en práctica.

Fuente Pinterest

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